Ya van varias semanas en las que estoy yendo a echar el sábado en el Poney Pisador. Los dueños, José y Rafael, han conseguido hacer que el lugar sea tremendamente agradable. El local es pequeño, recogido, pero está magníficamente ambientado. Son geniales las Puertas de Moria en un lienzo de pared, o la vidriera de Bilbo descendiendo por el río del Bosque Negro, con los enanos metidos en trece barriles.
En cuanto a las bebidas, están a buen precio, no está nada mal la variedad de cerveza que sirven, pero lo mejor son los especiales: Batido Hobbit (batidos con siropes, nata, virutas de chocolate y conguitos), Vino Élfico (un vino fino con hierbas aromáticas), tés, cafés…
Sin embargo, lo mejor de todo son los juegos: juegos de ingenio que puedes coger libremente para amenizar la velada y competir con los acompañantes. Tamgrams, pirámides, estrellas articuladas, el juego de los seis clavos (recomiendo este último), papiroflexia… y libros. Obviamente están El Señor de Los Anillos, El Hobbit, y me ha agradado encontrar algo de Alatriste: el cómic. Definitivamente, me gusta este sitio.
Lo dicho, un sitio muy agradable, con unos dueños buena gente y que se esfuerzan por hacerte sentir a gusto en tu estancia, y que vale la pena recomendar.