Al fin me he mudado; ahora vivo en un piso de taco junto a la estación de Santa Justa, con piscina, cochera y al lado de todo. Me encanta.
Ah, por cierto: y con conexión a internet con la patilla. Ah, las grandes maravillas de las conexiones abiertas…
Aun así, estoy algo paranoico; puede haber alguien (aparte de mí, claro) escuchando… Quizás sea más conveniente utilizar una conexión mas segura…