De hecho, el mero acto de abrir la caja determinará el estado del gato, aunque en este caso los tres estados determinados en los que podía estar el gato eran: Vivo, Muerto y Jodidamente Furioso
¡Jajaja! Y espera que el espíritu de Guzmán el Bueno no salga de su tumba para arrojar su daga desde las almenas de la iglesia-fortaleza del monasterio. Entonces sí que Fríker lo iba a flipar.
“Inquietante,fantasmagórico,casi demoníaco,es una espeluznante fotografía del monasterio”…Friker Jiménez.
¡Jajaja! Y espera que el espíritu de Guzmán el Bueno no salga de su tumba para arrojar su daga desde las almenas de la iglesia-fortaleza del monasterio. Entonces sí que Fríker lo iba a flipar.