El 12 de marzo de 2024, emprendí una ruta ciclista que no solo me permitió disfrutar de un agradable paseo, sino que también me sumergió en la oscura historia de un lugar emblemático de Andalucía. La etapa comenzó en Santiponce, una localidad cercana a Sevilla, y culminó en el cortijo de Gambogaz, en Camas. Un recorrido que repetí dos días después, confirmando la fascinación que despierta este trayecto.
La actividad, registrada en Strava bajo el nombre IB_2024-03-12-19-38-19, cubrió una distancia de 11.57 km y se desarrolló en un tiempo de movimiento de 35 minutos. A pesar de ser una ruta principalmente plana, con solo 10 metros de ganancia de elevación, la experiencia fue intensa tanto física como emocionalmente. La velocidad media fue de 19.7 km/h, alcanzando un máximo de 28.1 km/h en algún tramo del recorrido.
Partí desde Santiponce a las 19:02, aprovechando las últimas horas de luz del día. La ruta, detallada en GPS, serpenteaba entre campos y caminos rurales, ofreciendo vistas panorámicas de la campiña andaluza. A medida que avanzaba, la tranquilidad del entorno contrastaba con el macabro destino que me esperaba: el cortijo de Gambogaz.

El cortijo de Gambogaz es conocido por su siniestra historia; se hizo famoso por su vinculación con el general franquista Gonzalo Queipo de Llano, quien lo adquirió en 1937 tras el golpe de estado, recibiendo el título de «Salvador de Sevilla», y lo usó como residencia, convirtiéndose en símbolo del expolio franquista y foco de la lucha de la Memoria Histórica para su recuperación para el patrimonio público. Hoy, la torre del cortijo es Bien de Interés Cultural, pero la finca sigue en debate y bajo investigación por asociaciones memorialistas que denuncian una compra fraudulenta y reclaman su vuelta al dominio público.
Durante el recorrido, no pude evitar sentir una mezcla de curiosidad y respeto al pasar cerca del cortijo. La noche comenzaba a caer y la atmósfera se volvía cada vez más densa. Regresé a Santiponce con la sensación de haber vivido una experiencia única, donde el ciclismo se entremezcló con la historia.

Dos días después, repetí la etapa. Esta segunda vuelta me permitió apreciar detalles que había pasado por alto en la primera ocasión, como la belleza del entorno del Guadalquivir y el sonido de los pájaros que llenaban el aire. Sin embargo, el cortijo de Gambogaz seguía siendo el protagonista indiscutible, recordándome su oscuro pasado.

Para aquellos interesados en revivir esta experiencia, aquí está la actividad registrada en Strava:
Datos clave de la etapa:
- Distancia: 11.57 km
- Tiempo en movimiento: 0h 35m
- Ganancia de elevación: 10 m
- Velocidad media: 19.7 km/h
- Velocidad máxima: 28.1 km/h
- Fecha: 12 de marzo de 2024
- Tipo de actividad: Ride