El pasado 6 de julio de 2024, aprovechando la luz de una tarde de verano en Forcarey, Galicia, me lancé a una ruta corta pero intensa con la bicicleta de doble suspensión. El punto de partida fue Forcarey, un escenario privilegiado para el ciclismo de montaña por su relieve accidentado y sus senderos históricos. Con una temperatura máxima de 21.2°C y un ambiente seco, gracias a la ausencia total de precipitaciones registrada en la estación de Beariz, las condiciones eran ideales: terreno firme, agarre excelente y una temperatura que, al caer la tarde (comenzando a las 18:55), se volvía muy agradable para el esfuerzo físico.
La jornada comenzó con la salida de Forcarey en dirección a La Chamosa. Esta primera toma de contacto sirvió para calentar las piernas antes de enlazar con A Mámoa a través de una pista forestal. La elección de la bicicleta de doble suspensión no fue casualidad; el terreno de la zona, caracterizado por sus constantes cambios de ritmo y zonas técnicas, demanda una montura capaz de absorber las irregularidades y ofrecer tracción en los repechos más exigentes. A pesar de ser una ruta de apenas 13.84 kilómetros, los 659 metros de ganancia de elevación acumulados dan una idea clara de la exigencia del relieve gallego.
El plato fuerte de la etapa llegó al alcanzar A Mámoa. Desde este punto, inicié el descenso por la mítica Geira Romana, una vía cargada de historia que hoy se convierte en un paraíso para los amantes del Downhill. El tramo hasta el puente de Gomail es espectacular, un descenso técnico y rápido que pude registrar íntegramente con la cámara a bordo. La sensación de velocidad entre la vegetación y las piedras centenarias es indescriptible, especialmente cuando la suspensión trabaja a pleno rendimiento permitiendo trazar con precisión cada curva del camino.
Tras alcanzar el fondo del valle en el río, tocó cambiar el chip y enfrentarse a la subida hacia Gaxín. Las pendientes en esta zona no dan tregua, pero el paisaje recompensa el esfuerzo. Una vez coronado este tramo, el recorrido nos llevó de nuevo hacia el cauce del río Lérez, bajando por Casanova. Este descenso final hacia las proximidades del agua ofrece un entorno natural de gran belleza antes de encarar el regreso definitivo a Forcarey, pasando por A Ponte para cerrar una ruta circular perfecta en cuanto a técnica y sensaciones.
En conclusión, fue una tarde de puro BTT donde se combinaron el patrimonio histórico de la Geira Romana con el desafío físico de las cuestas de Terra de Montes. Una actividad que, aunque breve en tiempo, resultó sumamente gratificante por la variedad de terrenos y la calidad de los descensos realizados.
Datos clave de la etapa:
- Distancia: 13.84 km
- Tiempo en movimiento: 1h 2m
- Ganancia de elevación: 659 m
- Velocidad media: 13.3 km/h
- Velocidad máxima: 43.8 km/h
- Fecha: 6 de julio de 2024
- Tipo de actividad: Ride