05 abr 06 …da de beber al sediento.

Cuentan los de Pontevedra que su ciudad es famosa en toda Galicia porque da de beber al sediento. Una ciudad hospitalaria y tal. No seré yo quien lo desdiga, porque, al menos conmigo, se han portado siempre en tierras gallegas de fábula (salvo en la sede pontevedresa del BNG, pero cada cual tiene el cáncer que se merece, y esa es historia para otro día).

Tiene Pontevedra buenas fuentes, por eso lo de dar de beber, de las que se muestran muy ufanos. Fuentes, por cierto, buenas y escasas. Al menos para lo que estoy acostumbrado en Córdoba. Y claro, con el cachondeito del agua no pude dejar de improvisar unos ripios al respecto:

Pontevedra es buena villa,
da de beber al sediento
pero si es beber prefiero
la Taberna el Juramento.

En fin. El caso es que este sábado me voy para allá a pasar la Semana Santa. Y que nadie diga que me escapo de Sevilla o Córdoba para evitarme las procesiones; craso error, amigos. porque también en Pontevedra tienen procesiones de Semana Santa. Aunque ni los propios pontevedreses lo sepan.

Dado que no creo que pueda subirme la cámara de fotos digital, creo que voy a desempolvar las viejas cámaras tradicionales que tenemos criando polvo en casita. Es seguro que me voy a subir la Samsung AF Zoom 1050, porque aún me escuecen los 10 lerus que tuve que dejarme el año pasado para poder usarla en circunstancias similares. Y sólo para echar 5 fotos que aún siguen en la cámara. De este año no pasa. Más que nada porque tengo curiosidad por saber qué fotografié. No me acuerdo. ^_^
Pero sobre todo, me tienta sacar del cajón donde la tengo abandonada mi vieja Zenit 122. Me la regalaron mis padres cuando cumplí 15 años, y con ella me he recorrido media España, así como parte de Francia e Italia, cargando con los objetivos que le compró mi padre, en su tiempo, a su aún más vieja Zenit E, cuando hizo la mili en Canarias, allá por el 75. La última vez que la saqué fue cuando estuve de voluntario en Pontevedra, cuando lo del Prestige:

En cuanto a la bitácora, tal vez resucite el sistema de actualización mediante móvil que utilicé cuando hice el Camino de Santiago, ya que en casa de Ana (gracias a Diox) no tengo posibilidad de acceder a internet. Quién sabe. Tal vez tenga incluso cosas que contar. XD

Declaración de intenciones:

• Ponerme ciego de pulpo a feira.
• Coger la bici de Ana.
• Ir al Lepanto a comer patatas bravas (las mejores de Pontevedra).
• Bajar a Portugal, y no comprar toallas.
• Componerle un ordenador a Ana con las piezas viejas que tiene Zaixe diseminadas por ahí (para qué nos vamos a engañar, soy como soy).
• Volver a preguntar en la Oficina de Turismo de Poio si ya han señalizado la vía para bicicletas que tienen publicitada desde hace dos veranos.

Ah, eso sí. Otra vez a sacar la ropa de invierno… Es lo que tiene Galicia…