En las últimas semanas he estado realizando una serie de cambios bastante importante en mi sistema informático. Desde hace muchos años tengo desplegado en casa un servidor que históricamente ha contenido mi sitio web, pero que con el paso del tiempo ha ido ganando en funcionalidades: domótica, servicio de mensajería, automatización, almacenamiento, VPN, streaming de vídeo… Todo empezó en la Universidad, con unas prácticas de alguna asignatura que ni siquiera recuerdo, pero ha persistido con el paso del tiempo.
En un momento dado tuve una serie de sistemas aislados que complementaban al servidor: un Mini-ITX, un par de Raspberry Pi, una Asus Tinker Board, una NAS… Pero con el paso del tiempo fui simplificando. Un paso trascendental fue la consolidación de las máquinas físicas separadas en un único servidor de virtualización. Para ello escogí realizar un despliegue de ProxMox, virtualización basada en KVM, pero que proporcionaba una interfaz de usuario vía web bastante amigable, lo que hacía la administración del entorno fuera sencilla. Para ello utilicé un viejo PC de oficina con un procesador Intel y 4 GB de RAM. Todo bastante ajustado para contener tres máquinas virtuales: un frontal web NGINX que además desplegaba un servidor MQTT y VPN, un backend con el servidor web WordPress, securizado por el frontal antes comentado, y una máquina separada para el entorno de domótica. Durante años ha funcionado bien, pero hace unos meses el servidor, ya veterano cuando lo desplegué, empezó a presentar fallos hardware. El principal fue que se estropeó uno de los módulos de RAM, quedando reducida la cantidad disponible a 3 MB. Además, presentaba fallos de encendido en caso de que se fuera la luz, lo que hacía que la recuperación del sistema fuera bastante complicado.
Ante ello, decidí renovar el hardware, para lo que me puse a mirar precio de módulos RAM para añadirle el módulo faltante al PC, y también precios de PCs nuevos. Tanto lo uno como lo otro tenían precios elevados (la RAM por tener que adquirirla a través de Ebay y sitios así), y el PC nuevo por el hecho de comprarlo nuevo. Y en ello andaba cuando se me ocurrió una idea disparatada:
Hacerme con un servidor. Uno de verdad. No un viejo PC reconvertido. Un ser-vi-dor. Y resultó que la idea no era tan disparatada. Encontré un servidor HP DL360p Gen8 con doble fuente de alimentación, dos procesadores de 12 núcleos cada uno, 96 GB de RAM, 4 discos de 2 TB a 7200 RPM y controladora RAID, 4 puertos de red a giga, y un año de garantía por la ridícula cifra de 100€. Resultaba que la idea no era tan disparatada. Así que me hice con él. Pero es un servidor, claro. Está optimizado para el rendimiento. Y eso suele tener algunos problemillas cuando lo metes en una casa. Y no es el menor de ellos el que puede ponerse a sonar como un MIG 21 despegando.
Estas semanas he estado lidiando para poner el servidor de manera funcional, adaptarlo a un uso doméstico, volver a instalar un entorno de virtualización, y migrar las máquinas desde el viejo servidor. Por el camino he aprendido una serie de cosas bastante interesantes, y creo que vale la pena recopilarlas por si a alguien más le resultan interesantes, así que espero escribir unos cuantos artículos al respecto.
Etiquetas: domótica, home assistant, hp dl360p gen8, mqtt, nginx, proxmox, virtualización, vpn
Como decía en el anterior artículo, estoy haciendo algunas mejoras en la domótica de Forcarey, motivadas por algunos cambios en el dormitorio principal. En concreto, estamos poniendo un cabecero de cama con mesillas flotantes, que hace que el cabecero ocupe todo el frontal de la pared, impidiendo el acceso a las llaves conmutadas del dormitorio.
Esto implica que es necesario trasladar estas llaves al tablero del cabecero, lo que en condiciones normales implicaría abrir agujeros para empotrar las llaves y los enchufes, pero he pensado en hacer algo diferente para evitar hacer estos agujeros, que es usar pulsadores de tipo Zigbee, que al no necesitar cableado, son muy compactos y se pueden instalar simplemente en superficie.
He escogido un modelo compatible con Tuya con dos pulsadores independientes, que además permite realizar tres acciones por pulsador (pulsación única, doble y larga), lo que permite mapear hasta seis acciones, y que se alimenta con una pila de botón. Este modelo es compatible con Zigbee2MQTT, que es lo que tengo montado para mi domótica, lo que me permite controlar cualquier tipo de dispositivo, y no sólo dispositivos de tipo Zigbee.
En cuanto al interruptor, he escogido los Sonoff Mini R2, con los que ya tengo experiencia sobrada, a los que he instalado el firmware Tasmota, de tal manera que puedo controlar el dispositivo mediante MQTT.
El sistema de domótica es Home Assistant, lo que me permite definir automatizaciones para integrar el funcionamiento de los pulsadores Zigbee y del interruptor Sonoff Mini R2. Y en este caso, esta automatización me permite emular el funcionamiento de las llaves conmutadas. El despliegue ha sido el siguiente:
’0xa4c13855fdxxxxxx’:
friendly_name: interruptor_dormitorio_1
’0xa4c138adxxxxxx’:
friendly_name: interruptor_dormitorio_2
– platform: mqtt
name: “Luz dormitorio Forcarey 1″
state_topic: “topic_interruptor1/stat/dormitorio1/RESULT”
value_template: ‘{{ value_json["POWER"] }}’
command_topic: “topic_interruptor1/cmnd/dormitorio1/POWER”
availability_topic: “topic_interruptor1/tele/dormitorio1/LWT”
qos: 1
payload_on: “ON”
payload_off: “OFF”
payload_available: “Online”
payload_not_available: “Offline”
retain: false
- alias: Activacion simple del primer pulsador de las llaves
trigger:
– platform: mqtt
topic: topic_pulsador/interruptor_dormitorio_1
– platform: mqtt
topic: topic_pulsador/interruptor_dormitorio_2
condition:
condition: template
value_template: ‘{{ “1_single” == trigger.payload_json.action }}’
action:
entity_id: switch.luz_dormitorio_forcarey_1
service: switch.toggle
Hemos escogido un pulsador doble porque tenemos dos luces independientes en el dormitorio, una sobre la cama, y otra sobre la entrada a la habitación. Con esto, tenemos un bonito sistema para controlar la iluminación de manera independiente (con un segundo Sonoff Mini R2 para la otra luz, conectado de manera equivalente, claro), y tenemos aún cuatro acciones disponibles para controlar otros aspectos, como la calefacción o cualquier otro elemento la casa. Todo un progreso que nace de la necesidad de evitar taladrar el cabecero.
Etiquetas: home assistant, homeassistant, mqtt, sonoff mini, tuya, zigbee, zigbee2mqtt
Desde hace algún tiempo tenemos en casa un par de Toyotas, un Auris y un Aygo. El Aygo es de 2021, y tiene algo bastante interesante, y es que dispone de conectividad con la plataforma de servicios conectados de Toyota. Con ello, se puede acceder a información sobre viajes, historial, así como generar avisos automáticos en caso de accidente. Existe una aplicación oficial MyToyota, que permite acceder a dichos servicios desde el móvil, además de poder hacerse a través de la web de Toyota.
Pero lo que es más interesante es que alguien se ha currado un proyecto en GitHub que permite acceder con Python 3 a dicha plataforma: MyToyota. Es una versión puesta al día de otro proyecto, MyT, que hacía básicamente lo mismo, pero con una versión anterior de la API de los servicios conectados de Toyota que ha dejado de estar disponible a finales de 2023.
A partir de aquí, ya es echarle imaginación. En mi caso, he desarrollado un programa que permite recabar la información de posicionamiento del vehículo, e inyectarlo en mi MQTT, para integrar esta información en Owntracks. Así tengo centralizado el seguimiento de mis vehículos en una plataforma abierta.
Hace ya algunos años, cuando aún vivíamos en Irlanda, desarrollé un sistema de telemetría casero para el Mercedes C180 Sportcoupe que teníamos allí, basado en una Raspberry Pi y un receptor GPS, junto con un conector OBD-II por Bluetooth para leer datos de la centralita del coche. Fue un sistema que estuvo funcionando estupendamente bien, pero que dejé de utilizar, por razones que no vienen al caso.
En fechas recientes me he decidido a revivirlo (también por razones que no vienen al caso), pero quería darle una vuelta de tuerca al sistema, para cambiar algunas características que -estando bien- no se amoldaban del todo a mis necesidades. La principal de ella es que el sistema original dependía de una conexión Bluetooth con un teléfono móvil que hiciera de módem sobre este medio, a fin de proporcionar conectividad al exterior. Buscaba que la nueva versión del entorno tuviera conectividad independiente, a fin de poder hacer seguimiento del coche de manera más sencilla. Mi primera idea fue conectar un modem USB a la Raspberry Pi, pero se trata de un modelo 2 de la RPi, que sólo dispone de 2 conexiones USB, y ambas estaban en uso: una para el receptor GPS, y otra para el dongle Bluetooth que se necesita para conectar con la centralita del coche. Pensé en portar todo a una RPi más moderna, pero fue aquí cuando entró en danza el siguiente artilugio:
Se trata de un dispositivo LilyGO TTGO T-A7670G. Se trata de un ESP-32 que proporciona, de manera simultánea, conectividad Bluetooth, zócalo para tarjetas de telefonía 4G, receptor GPS, e incluso un zócalo para conectar una batería 18650, todo ello en una sola placa. Ya tenía experiencia trabajando con ESP-32 en Arduino, lo cual era una gran ventaja para mí, además de trabajar con estos componentes por separado, pero nunca lo había hecho con una placa de fabricante que proporcionara todos estos elementos de manera integrada. Mucho mejor que tener que ir montando componentes por separado.
El fabricante, además, proporciona un repositorio en GitHub donde acceder a librerías, ejemplos de código, documentación, e incluso esquemáticos de carcasas, lo que ha hecho que haya podido imprimir una caja para el dispositivo:
Con todo esto, he podido realizar una nueva versión del sistema de telemetría, con las siguientes características:
Además, la placa viene con una antena GPS pasiva. Esto está bien si el dispositivo se encuentra directamente al aire libre, pero era problemático si estaba dentro de una casa o de un coche, ya que apenas tenía cobertura. Para solucionar este inconveniente tuve que hacer uso de una antena GPS activa con conector SMA, y hacer uso de un pigtail UFL/U.FL/IPX a RP-SMA/SMA. Nada grave, pero sí un poco molesto. Ahora bien, en cuanto dispuse de esta antena activa el sistema pasó a ser capaz de detectar señal GPS incluso en interiores. Todo una diferencia, y sin necesidad de reprogramar.
En estos días he estado haciendo algunas pruebas, y al margen de la captura de datos de la centralita, el resultado es bastante bueno. Espero poder seguir haciendo mejor al respecto en las próximas semanas.
Etiquetas: a7670, arduino, bluetooth, esp32, gps, impresora 3d, lilygo, mqtt, obd-ii, telemetría
En fechas recientes he implementado un elemento adicional de interacción con la domótica. No es algo especialmente nuevo (de hecho, ya en Irlanda empecé a trastear con ellos), pero sí es algo que he recuperado recientemente: el uso de tags NFC para interactuar con la domótica, usando teléfonos inteligentes. La idea es bastante sencilla: desplegar una serie de tags desplegados por la casa, allí donde quiera que se dispare una acción concreta, para escanearlo con el teléfono, y ejecutar la acción. Y el elemento más obvio para ello es el control de luces inteligentes.
En mi caso, tengo desplegadas dos tecnologías diferentes para el control de luces inteligentes: interruptores WiFi (básicamente, diversas variedades de Sonoff) y luces Zigbee, que controlo mediante sendas plataformas zigbee2MQTT que tengo tanto en Santiponce como en Forcarey. Todo ello integrado en mi servidor MQTT, que se utiliza también con la plataforma HomeAssistant. La gracia del asunto es que toda la interacción con ellas se realiza desde el propio HomeAssistant, independientemente de la tecnología subyacente. Y siempre usando MQTT como elemento de mensajería.
Para poner en marcha el sistema de interacción basado con NFC he optado por lo siguiente: codificar en los NFC el envío de un datagrama UDP. La razón de hacerlo así es que es que de esta manera se evita, como es el caso de conexiones HTTP o similar, el tener que hacer uso de un programa específico en el teléfono, ya que mediante el envío del datagrama se evita que el usuario tenga que interactuar con ninguna aplicación, haciéndose el envío siempre en segundo plano. Esto implica que es preciso tener abierto en algún lugar un puerto UDP al que enviar los mensajes. Y la opción obvia en mi caso es hacer uso de Node-Red.
Así pues, he hecho un flujo bastante simple, que lo que hace es exponer un puerto UDP, a donde el teléfono envía la mensaje del datagrama. Este mensaje, en líneas generales, es un alfanumérico que me permite identificar qué luz quiero encender (por ejemplo, santiponceSalon1, para identificar la luz principal del salón de Santiponce). Una vez recibido el mensaje, se procesa en un switch, con tantas entradas como luces a controlar (en mi caso, de momento, 4), y se incluye en el payload el mensaje de encendido/apagado. Aquí hay dos opciones:
Una vez publicado el flujo, el servidor donde tengamos desplegado Node-Red abrirá un puerto UDP para escuchar conexiones (aconsejo hacer uso de un puerto alto, para evitar tener que asignar permisos de root). En mi caso, dado que publico Node-Red mediante un contenedor docker, es por lo que tenía que realizar una publicación de puertos del contenedor, de lo que hablaba en el artículo anterior. Y con esto, estaremos listos para controlar las luces con un móvil NFC.
Un par de comentarios adicionales:
Etiquetas: android, domótica, homeassistant, mqtt, nfc, node-red, sonoff, tasmota, udp, wifi, zigbee, zigbee2mqtt